Conectores vs. Polarizadores

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English original here [2]

En su libro The Tipping Point (reseñado aquí), Malcolm Gladwell habla sobre la importancia de las personas que él llama Conectores, Expertos, y Vendedores en la propagación viral de las ideas. Los Conectores son personas que tienen el don de hacer amigos y conocidos. Gladwell atribuye esta habilidad a “alguna combinación de curiosidad, auto-confianza, sociabilidad, y energía” (p. 49).

Aunque él no habla sobre introversión y extroversión, los ejemplos que utiliza indican que los buenos Conectores son extrovertidos, quienes se ven energizados en lugar de drenados por las interacciones sociales.

Los buenos Conectores son personas que tienen un pie en muchos mundos sociales diferentes y entonces los pueden unir. Interesantemente, en términos de encontrar nueva información y oportunidades, las conexiones más ventajosas son en general lazos débiles de familiaridad. Esto tiene sentido, porque tus amigos más cercanos son todos del mismo mundo social, así que entra en razón que los conocidos expandan tus conexiones a otros reinos.

Los conectores son extremadamente valiosos para la difusión de las ideas a través de la palabra hablada, simplemente porque ellos conocen más personas en más reinos sociales.

En mi experiencia, los mejores Conectores no son sólo personas que estiran su brazo, sino que son acercables y responsivos cuando otros se acercan a ellos. Esta es la mitad de como las conexiones se hacen. Una vez realizadas, tales conexiones tienen que ser mantenidas también. Es por esto que Facebook es tal bendición para nosotros. Aunque es estar a la moda burlarse de los medios sociales, lo que lo diferencia de los otros medios es que facilita las conexiones interpersonales, particularmente las flojas, tediosas, y lejanas que son en realidad las que más expanden el mundo.

Mucha gente del movimiento ridiculiza al internet en favor del mundo real. Por supuesto el mundo real es donde la política ocurre. Pero antes de la política viene la metapolítica: compartir ideas y construir redes.  Y el internet es genial para eso. Apostaría que el 95% de los Nacionalistas Blancos por debajo de los 50 años no estaría con nosotros si no fuera por internet.

El principio más importante de la conectividad del movimiento que conozco es lo que llamo el principio del Club de la Pelea: todos pueden elegir su propio nivel de involucración y explicites y todos los demás tienen que respetar esa decisión. Debido a que cada sociedad, más allá de su ideología, es gobernada por un grupo de personas por sobre el promedio, necesitamos reclutar las personas por sobre el promedio a nuestra causa. Pero la gente que tiene la mayoría de las habilidades, recursos, y conexiones también es la que más tiene que perder. Tales personas no se involucrar en un movimiento disidente a menos que tengan un resguardo razonable de que respetaremos su privacidad. La gente que se queja y mira mal a la gente que no desea volverse explícitamente defensores enciende alarmas. No pueden ser confiados. Puede que “expongan” a la gente algún día. Así la gente prudente no debería y no tendría que tener nada que ver con ellos. Si quieres que la gente se conecte a ti, ellos necesitan saber que entiendes y respetas las decisiones en relación a su nivel de compromiso.

El mejor Conector que conozco en el mundo Nacionalista Blanco es Jez Turner del London Forum, quien es una de las razones por las cuales el London Forum es tan exitoso, realizando importantes conferencias varias veces al año. Debido al amargo faccionalismo y las personalidades dificultosas en el movimiento, este nivel de éxito requiere una diplomacia excelente y mucho sentido del humor. La razón por la cual no hay eventos a lo London Forum en cada mayor ciudad europea es que hay falta de buenos Conectores.

Una de las debilidades en depender de los Conectores es que una vez que no están, la red es destruida. Esto es lo que pasó cuando mi amiga Beryl Cheetham, quien era un importante conector, murió este año. Una vez que ella se fue, no tenía forma de conectar con las personas que conocí a través de ella. Pero hubo suficiente redundancia en nuestra amplia red que pude reestablecer esos lazos, y la persona que mejor me ayudó resultó ser Jez Turner.

Debido a mi rol como Editor de Counter-Currents, soy un conector de facto. Pero no soy bueno en ello. Psicológicamente, soy introvertido (INTJ, para ser exactos), así que es un esfuerzo para mí. En cierto punto, no puedo con una interacción social más y me apago, es por eso que en general soy un correspondiente tardío. Tampoco soy bueno haciendo múltiples cosas o recordando nombres. Idealmente, tendría un asistente que sea extrovertido y bueno en hacer múltiples tareas (las mujeres son típicamente mejores en eso que los hombres).

Gladwell no habla de lo opuesto a los Conectores, los cuales son los polarizadores: una persona que cosecha desconfianza y discordia. Los Conectores construyen el capital social del movimiento. Los polarizadores lo destruyen. Me he encontrado con dos tipos de polarizadores.

El primer grupo son polarizadores por principio: ellos abiertamente anuncia que su estrategia es someter a cualquiera que esté cerca de lo mainstream a despiadados ataques, tanto ideológicos como ad hominem,  en teoría porque esto separaría a las personas y las ganaría para su grupúsculo de vanguardia. No niego que ese tipo de acercamiento puede atraer a cierto tipo de personas, principalmente masoquistas con complejos de inferioridad o “nenes perdidos” sin padres- el tipo de personas que quieren unirse a los Marine después de ver Full Metal Jacket, por ejemplo. Pero, como argumenté en mi ensayo The Smartest Guy in the Room [3], sólo atrae a personas que son inferior a quien sea que está haciendo la arenga, la cual no es forma alguna de poner al movimiento en un camino ascendente atrayendo a personas increyentemente mejores. La gente superior simplemente ignora a tales polarizadores, o los quieren aplastar como insectos. Sospecho que los polarizadores por principio están simplemente tratando de transformar en virtud la indulgencia de su propio caprichoso narcisismo y sus tendencias hacia la paranoia y la amargura.

Los polarizadores más ponzoñosos son aquellos que actúan como Conectores. Como Conectores genuinos, a ellos les gusta estar en el centro de las cosas. Pero en su impulso dominante está la gratificación del ego, y cuando eso choca con las necesidades del movimiento, el movimiento siempre pierde. He tenido situaciones con dos de este tipo de personas a lo largo de los años. Ambos posaban como Conectores y puntos de unión de diferentes campos y facciones. Pero empecé a notar problemas.

Primero, más allá de posar como puntos de unión, la tendencia de su pensar es siempre hacia lo negativo. Son chusmas, porteros, envenenadores de pozos, purgadores, y alejadores.

Segundo, ellos prefieren lo secreto y lo arbitrario y una campaña de susurros para abrir las discusiones, de forma que los acusados no se puedan defender a sí mismos.

Tercero, ellos siempre insisten en mantenerse el hombre del miedo. Ellos no pueden poner a la gente en contacto y dejar que se arreglen entre ellos, porque en ese punto ya no son necesarios.

Cuarto, me contarán historias designadas a alienarme de la gente que conozco.

En ambos casos, sin embargo, resultó que estas personas eran mentirosos patológicos. Y sus mentiras servían un solo propósito: generar drama e intriga alrededor de ellos mismos, quienes aparentemente satisfacían una necesidad neurótica de atención y el deseo de sentirse poderosos. No hay realmente forma de calcular cuánto daño han realizado este tipo de reinas del drama al movimiento, debido a que la gente que ellos separan nunca comparan notas y se dan cuenta de que han sido engañados.

La discusión de Gladwell sobre los Conectores trae a un muy importante fenómeno en foco. Los Conectores son extremadamente valiosos y extremadamente raros. Si queremos que nuestro mensaje se vuelva viral, necesitamos encontrar y cultivar Conectores cuyos tentáculos se estiran a tantos mundos diferentes como sea posible.

Los polarizadores, al contrario, son una plaga. Los polarizadores abiertos son fáciles de diferenciar y son generalmente ignorados, porque el mejor tipo de gente no quiere trabajar con imbéciles. Los polarizadores reinas del drama son sigilosos y un problema mucho mayor, pero ahora sabes cómo verlos.

En mi próximo ensayo, miraré la discusión de Gladwell sobre Expertos y Vendedores.